jueves, 5 de agosto de 2010

Aprender a soltar…

Quería escribir al respecto desde el martes… ese día llegué a una de las colonias donde me toca trabajar y al bajarme del auto me encuentro con la noticia de que falleció *Juanito un chico discapacitado de 13 años, como era de esperarse la madre inconsolable, algunas vecinas afuera (por solidaridad) haciendo bromas entre si y poniéndose al día con las últimas noticias de la colonia.


Este tipo de escenas son bastante comunes en esas ocasiones. Pretendía originalmente hablar sobre el proceso de muerte; pero consideré más oportuno aprovechar la ocasión para escribir acerca de esa parte que poco se menciona y que casi nadie nos enseña… Aprender a soltar…


Respecto a la muerte, comenzamos a morir desde el día en que nacemos… “algunos son más eficientes y no pierden tanto tiempo muriéndose, mientras que otros esperan mucho tiempo.” (Milton Erickson)


Recordemos que venimos a este mundo solos y sin nada (excepto los siameses y los gemelos vienen acompañados de alguien más). Sin embargo desde que tenemos uso de conciencia aprendemos por imitación o porque así nos lo enseñan que debemos acumular y cuidar “nuestras cosas”, empieza entonces un largo peregrinar de deseo donde quiero, obtengo y guardo, muchas veces sin disfrutar de lo que ya tengo, otra creencia errónea es la de… cuando tenga o logre esto o aquello seré feliz. Y se me pasa la vida entera sin apreciar y disfrutar de lo que tengo en el momento.


Aprendo a poseer y por consiguiente si considero que algo me pertenece y posteriormente me es arrebatado un parte de mi se desmorona. Sin ser consciente que desde el momento del nacimiento empiezo a soltar (comenzamos a soltar células muertas, cabello, dientes etc.), que generalmente las cosas suceden por algo, ya sea el proceso natural o las consecuencias de algo que ya venía porque yo mismo lo causé o porque alguien o algo más intervino y ese algo estaba fuera de nuestras manos (y si estaba fuera de nuestras manos… ¿para qué martirizarme por algo que está fuera de mi control?)


Poseo bienes materiales, amistades, personas, trabajos (al menos eso creo y el hecho de poseer me lleva a adquirir temor de perder eso que poseo)


Entre más apegado a algo o alguien se esté, mayor será el sufrimiento al momento en que deje de estar ese algo o alguien. Y… ¿realmente disfrutaba de todo eso que en algún momento estuvo en mi vida? Si se trataba de trabajo, ¿lo disfrutaba desde el momento de levantarme hasta el momento de regresar a casa? En el caso de de las amistades ¿disfrutaba cuando estuvieron en mi vida? O ¿solo era el hecho de coleccionarlas? ¿Disfruto cada segundo de mi familia, pareja? Recordando que son seres independientes de mí, que viven una vida a parte sabiendo que en cualquier momento pueden dejar de estar, ya sea por emprender nuevos proyectos de vida o por finalizar el proceso de vida.


Para Aprender a soltar, es necesario primeramente aprender a amar, de lo contrario será sumamente difícil soltar y sufriremos. Es distinto sentir dolor que sufrir, el dolor es algo real y es pasajero, el sufrimiento es una creación mental y puede permanecer indefinidamente.


Puedes decir sinceramente… amo esto o aquello, sabiendo que puede permanecer indefinidamente, durar unos segundos o años y simplemente disfrutar, sabiendo que es solo un complemento, en lugar de toda la razón de mi existencia y felicidad. Los bienes materiales son un medio, cumplen una función y en algún momento es necesario reemplazarlos, si somos inteligentes les sacamos el mayor provecho. Los seres vivos nos complementamos, mientras esto funciona para las dos partes es perfecto. Si llegas a una fiesta lo más lógico es que trates de disfrutarla desde el momento en que llegas, cuando te cansas es momento de retirarte y todos tan felices, en ocasiones decides quedarte y de ti depende disfrutar la fiesta; pero tarde o temprano la fiesta debe llegar a su fin. Lo mismo pasa con las relaciones y la vida.


Si en este momento de tu vida estás soltando algo, vívelo como es, ¡es real! sientes ganas de llorar, adelante, solo recuerda que la vida sigue su curso y mientras decides quedarte en casa lamentándolo te estás perdiendo de la vida misma. Te estás perdiendo de tu familia y amistades, ¿necesitas un tiempo para reflexionarlo? Adelante toma el que necesites, la soledad en ocasiones es necesaria para estar con nosotros mismos y escucharnos, pero como seres sociables que somos tenemos que regresar al mundo en algún momento. El reloj sigue avanzando, el tiempo que dejes de disfrutar es imposible reponerlo.


Disfrutala cada momento como si fuera el último, reparte abrazos y sonrisas, ¡son gratis!

*El nombre del chico fue cambiado

3 comentarios:

  1. Aprender a amar, labor que nos toma toda una vida....y quien sabe...tal vez más...

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  2. Extraordinaria reflexión.
    Tan difícil como parece dejar ir… Lo es!
    Pienso que la interminable angustia emocional hacia la no permanencia, forma parte básica de la lucha mental de todo ser humano.
    Gracias por compartir tan real e interesante escrito.
    Saludos

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  3. LO MAS IMPORTANTE ES NO VIVIR DEL PASADO NI DE RECUERDOS, ESO JAMAS VOLVERA SOLO ES UNA ETAPA, CERRAR CIRCULOS, EL PASADO JAMAS REGRESARA Y VIVR EL PRESENTE ES CONSTRUIR EL FUTURO EL QUE VIVE AÑORANDO SU PASADO ESTA CONDENADO A NO SER FELIZ YA QUE NO VALORA SU PRESENTE Y ESTA CONDENADO A QUE EN SU FUTURO SIGA AÑORANDO EL PASADO PUES TODO LO QUE LA VIDA LE PRRSENTE NO LO AQUILATA HASTA QUE LO PIERDE. (OJALA LO ENTENDIERAS RAFA)

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